SITGES 09 – Día 03

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Día maratoniano de sorpresas y gritos…

Y los gritos no es que fueran por miedo precisamente, sino que eran emitidos por las gargantas de l@s fans enloquecid@s de Twilight aka Crepúsculo que hacían cola desde la noche anterior a las puertas del Auditori para ver la llamada Twight Saga: New Moon Preview. Sí, Preview. Al igual que el año pasado en el que un buen montón de chavalas hacían cola para ver el primer trailer de Twilight, este año cantidades ingentes de chavalería (y no tan chavales) esperaban deseosos de ver sus trailers exclusivos. Y realmente el espectáculo no estaba en los trailers o previews, sino en las colas de fuera.

Pero antes de todo esto la primera sorpresa del día nos esperaba pacientemente. Y es que Daniel Monzón nos tenía preparada una película que sorprendió a muchos de los allí presentes. Celda 211 es una de esas películas que te muestran el verdadero significado de «lugar equivocado en el momento equivocado«.

Un funcionario de prisiones llega a su nuevo lugar de trabajo el día antes de su incorporación, para ir conociendo el lugar y tal… Hasta que se encuentra de golpe y porrazo un motín carcelario del cual debe de sobrevivir al precio que sea (el anonimato puede ser tu mejor amigo muchas veces). Rodada bastante bien por el sr. Monzón, pero lo que realmente se lleva la palma de la película es el papel de un grandísimo Luis Tosar en la piel de Malamadre, el líder de todo lo acontecido.
Esta película a su vez ha creado varios monstruos, y es que algunas frases y/o personajes de la cinta fueron mentados en sesiones y días posteriores. Pero ya entraremos en detalles cuando llegue el momento.

Y como curiosidad, a mitad de la proyección, sólo se escuchaban chillidos y gritos histéricos desde la calle. Todos nos mirábamos… Había llegado Jaime Campbell, uno de los protagonistas de Luna Nueva… Ahí estaba la explicación…

La mañana se quedó simplemente con Celda 211 y con la marabunta de Twilight. Pero la tarde acaba de comenzar. Y el primer plato fuerte fue la película de animación Summer Wars. Realmente espectacular. Reconozco que rindo pleitesía a Madhouse desde que me maravilló con Mind Game allá por el año 2005. Y al director Mamoru Hosoda por su The Girl Who Leapt Through Time. Y Summers Wars me ha vuelto a dar lo que esperaba de ellos, e incluso más.

Curiosa la alegoría que nos plantea la película, en la que una red social de internet, mezcla de Facebook, Twitter, Messenger y similares es pirateada por una metedura de pata de nuestro protagonista. A raiz de ahí, el colapso mundial es asegurado, y la carrera contra reloj para evitar un desastre comienza. Y lo mejor de todo, sin duda, la familia de la chica. Acción, risas, y una animación espectacular avalan al nuevo proyecto de Madhouse (que ahora se han metido en hace series animadas para Marvel. De momento una de Iron Man y otra de Lobezno aseguradas).

Seguimos con Grace, uno de los supuestos pesos pesados de la semana, pero que a mi gusto se queda en agua de borrajas. Una madre embarazada a la que le diagnostican la muerte del feto, decide esperar al parto para parirlo, y para sorpresa de todos, éste resucita… pero adquiriendo un hábito alimenticio bastante peculiar, que no es otro que no alimentarse de leche, sino de sangre.

Al igual que en Thirst, que el vampirismo es un medio como otro cualquiera para contar una historia, aquí nos encontramos con las medidas desesperadas de una madre por hacer que su hijo siga adelante. Aunque como ya he comentado, para mí, lo mejor de la película es su siniestro poster.
Como curiosidad de esta proyección, comenzó sin sonido, haciendo que el masivo público (primera sesión que vi completo el Auditori) doblara el conocido anuncio del festival que homenajea al aniversario de Alien, efectos sonoros incluídos.

¡¡Grande el público de Sitges!!

Y sin movernos mucho del asiento, nos plantamos en otra de las sorpresas del día. La película griega Kynodontas (o Dogtooth, o como se le llamará aquí, Canino). ¿Cómo hacer que tus hijos crezcan libres de hipocresía, malicia, y malas influencias en general? Sencillo. Haciendo que nunca salgan de casa, y creándoles una realidad alternativa del exterior en la cual, el gato es el animal más peligroso del mundo, entre otras ideas locas y surrealistas. Comedia muy ácida, que también se pasará por el Festival de Cine Europeo de Sevilla, a cuyo pase invito a todos mis conocidos cinéfilos.
Y no puedo obviar unas de las anécdotas dentro del visionado, cuando uno de mis colegas apuntó en cierta escena: «Es verdad que el cine duele«. Cuando la veáis sabréis a qué me refiero.

Ya vamos por 4 películas hoy, y el día ho ha acabado aun ni mucho menos. Ahora le toca el turno a Sorority Row, película deudora (por no decir copia) de otras miles, desde Scream, hasta Sé Lo Que Hicísteis el Último Verano, y un largo etcétera. Lo mejor de todo es que al menos ésta sabe qué es lo que va a mostrar y se toma a guasa a ella misma. Sino no tendrían cabida frases como:

– «Tu hermana está muerta»
– «Sí, pero no tanto como tu pelo»

Realmente alucinante (¡y divertido!). La película en sí no tiene más del otro mundo. Un grupo de (impresionantes) chicas comenten una locura que pretenden ocultar, hasta que alguien comienza a matarlas por aquello que hicieron. ¿Os suena? Como digo, es un cúmulo de situaciones ya vistas, con la única diferencia que el arma del misterioso asesino es el gato de un coche (ya os dije que todo en esta película era alucinantes ^^). Y atentos todos que sale Carrie Fisher como la jefa absoluta de la hermandad Theta-Pi a la que pertenecen todas las protagonistas.
Muchas risas y aplausos con las muertes y las frases ingeniosas del guión. Para echar un buen rato con los colegas (y disfrutar de las mozas que salen en ella).

Ya un poco agotados, nos plantamos en la sesión nocturna de Pandorum. Película que se las prometía bastante bien, con una campaña de publicidad bastante cuidada (buen trailer, y posters totalmente abstractos que nunca sabías lo que estabas viendo). Al final nos encontramos con una (mala) mezcla entre Alien y Horizonte Final, por citar 2, porque es un batiburrillo de ideas de otras películas que pretenden ser original pero que no consigue lo que busca. Eso, aderezado por un sonido infernalmente alto en el Auditori y unas escenas realmente oscuras durante todo el metraje, hizo que el pase fuera una especie de suplicio personal similar al que viven los personajes de la película.

Un grupo de técnicos despierta de su criogenización para suplir al anterior escuadrón en su labor, cuando descubren que la nave está plagada de unos seres no muy benevolentes. Ni mucho más ni mucho menos.
Desgraciadamente no se le pueden pedir peras al olmo.

Los premios de hoy iban dedicados a José Ramón Larranz, cuya María Honorífica le fue entregada por sus «Hijas de Drácula«, aun bien servidas de lo suyo, pese a la edad, lo cual agradeció mucho el director; a Hershell Gordon Lewis (Maquina del Temps) y a Jack Taylor (Premio Nosferatu) aludiendo que siempre que se recibía un premio a una vida dedicada a lo que fuera, era presagio de muerte. Genio y figura.

Un día que prometía ser bastante flojo (para ser Sábado) se convirtió en uno de los mejores para un servidor, tanto por la calidad de algunas las películas, como por las vivencias y risas vertidas en las salas.

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